Les invitamos a participar en los cultos este domingo.
Agradecemos a Pastor Kurt Gysel que va a realizar los cultos.
El tema del sermón será:
El Señor, su siervo y los hombres
Der Herr, sein Knecht und die Menschen
Sobre Isaías 42,1-9
Compartimos abajo el texto bíblico.
Cultos en la Iglesia El Redentor: (Lota 2330, Providencia)
A las 10:30 hrs en alemán y a las 12:00 hrs en castellano
con Pastor Kurt Gysel
con culto para niños.
(En enero y febrero no hay cultos en la Iglesia San Pablo.)
Les saluda cordialmente su equipo pastoral
Texto de sermón:
En castellano:Isaías 42,1-9:
»Aquí está mi siervo, a quien sostengo,
mi elegido, en quien me deleito. He puesto en él mi espíritu
para que traiga la justicia a todas las naciones. 2 No gritará, no levantará la voz, no hará oír su voz en las calles, 3 no acabará de romper la caña quebrada ni apagará la mecha que arde débilmente. Verdaderamente traerá la justicia. 4 No descansará ni su ánimo se quebrará, hasta que establezca la justicia en la tierra. Los países del mar estarán atentos a sus enseñanzas.» 5 Dios, el Señor, que creó el cielo y lo extendió,
que formó la tierra y lo que crece en ella, que da vida y aliento a los hombres que la habitan, dice a su siervo: 6 «Yo, el Señor, te llamé y te tomé por la mano, para que seas instrumento de salvación; yo te formé, pues quiero que seas señal de mi alianza con el pueblo, luz de las naciones. 7 Quiero que des vista a los ciegos y saques a los presos de la cárcel, del calabozo donde viven en la oscuridad. 8 Yo soy el Señor, ése es mi nombre, y no permitiré que den mi gloria a ningún otro
ni que honren a los ídolos en vez de a mí. 9 Miren cómo se cumplió todo lo que antes anuncié, y ahora voy a anunciar cosas nuevas; se las hago saber a ustedes antes que aparezcan.»
Auf Deutsch:
Jesaia 42,1-9
Siehe, das ist mein Knecht, den ich halte, und mein Auserwählter, an dem meine Seele Wohlgefallen hat. Ich habe ihm meinen Geist gegeben; er wird das Recht unter die Heiden bringen. 2Er wird nicht schreien noch rufen, und seine Stimme wird man nicht hören auf den Gassen. 3
Das geknickte Rohr wird er nicht zerbrechen, und den glimmenden Docht wird er nicht auslöschen. In Treue trägt er das Recht hinaus. 4Er selbst wird nicht verlöschen und nicht zerbrechen, bis er auf Erden das Recht aufrichte; und die Inseln warten auf seine Weisung.
5So spricht Gott, der Herr, der die Himmel schafft und ausbreitet, der die Erde macht und ihr Gewächs, der dem Volk auf ihr den Atem gibt und Lebensodem denen, die auf ihr gehen: 6Ich, der Herr, habe dich gerufen in Gerechtigkeit und halte dich bei der Hand. Ich habe dich geschaffen und bestimmt zum Bund für das Volk, zum Licht der Heiden, 7dass du die Augen der Blinden öffnen sollst und die Gefangenen aus dem Gefängnis führen und, die da sitzen in der Finsternis, aus dem Kerker. 8Ich, der Herr, das ist mein Name, ich will meine Ehre keinem andern geben noch meinen Ruhm den Götzen. 9Siehe, was ich früher verkündigt habe, ist gekommen. So
verkündige ich auch Neues; ehe denn es sprosst, lasse ich’s euch hören.